Dias de sol y playa

Después de todas las guardias, todos los papeleos, todas mudanzas, los problemas con la furgo, las despedidas, los viajes y los paseos mochila arriba-mochila abajo, por fín,.... semanita de playa para NO HACER NADA.

Punta del Diablo nos ha sorprendido mucho, para bien, un pueblecito todavía pescador, pero con infinidad de cabañas más o menos modernas para alquilar, convirtiéndose en un sitio hiperturístico, pero sólo durante dos meses, enero y febrero, y en marzo se vacía de repente al empezar el curso escolar, lo que nos ha venido perfecto, porque nos hemos visto casi solos en la playa.

Han sido dias de bajar a la playa, de quemarnos, de leer libros, de cocinar, de tomar cervezas viendo el atardecer, vaya, de descansar.

 La playa de la Viuda, donde teniamos nuestro apartamentito, vacía al atardecer.

 Aunque parezca increíble Luis accedió a bajar a la playa, una pena que se quemara el primer dia y ya encontrara una buena excusa para escaquearse.

Esta va por las de Barbastro,  esa peineta recorrerá todo lo que pueda hasta que se rompa (ya lleva un par de golpecillos en la mochila), la próxima foto con un fondo diferente :)

Atardeceres desde la terracita...

En nuestra ajetreada vida de playa sacamos un día para visitar el parque de Santa Elena, con fortaleza Portuguesa-Española incluida, bastante parecida a Montjuic, nos quedamos con los bosques de eucaliptus, los pajaros (aunque preferimos los libres), las zonas de acampada en las que nos encontramos otras "furgos raras" como la nuestra y las playas sin construcciones ni apartamentos en la orilla.

 ¿Cuantos bistecs salen de cada uno de estos?

 ¿Cuantos loros sois capaces de contar en las ramas??

Además hemos aprovechado para ir organizando la llegada de la furgo y el primer destino cuando la tengamos... Rosario, gracias a la insistencia del "Control de tierra" que vendría a ser Carlos, organizándonos lo que nos va a hacer falta en los próximos dias... Gracias!